Pidamos todos al Señor que nos llame a un tiempo de renovación eucarística, un tiempo de oración y reflexión, de actos de caridad y de sincero arrepentimiento. El Señor está con nosotros en el Misterio Eucarístico celebrado en nuestras parroquias y misiones, en nuestras hermosas catedrales y en nuestras capillas más pobres. Él está presente y se acerca a nosotros, para que nosotros podamos acercarnos a él.
-- Obispos Católicos de los Estados Unidos, El misterio de la Eucaristía en la vida de la iglesia, no. 58