No es extrano encontrar referencias a las diversas intervenciones realizadas por el episcopado chileno durante el Vaticano II, tanto por el llamado Esquema chileno, propuesto como alternativo al De Ecclesia, asi como por la voz del card. Silva Henriquez, Arzobispo de Santiago, o la valorada figura de mons. Manuel Larrain, Obispo de Talca y fundador del CELAM. A esto se suma el significativo numero de intervenciones de miembros de este episcopado que efectivamente se conservan en los Acta Synodalia. Esta investigacion amplia y basada en las fuentes, reconoce y sistematiza las lineas teologicas que subyacen al conjunto de la participacion chilena y su contribucion especifica a los debates y documentos conciliares. "Es la Iglesia entera que se congrega", asi expresaban los obispos chilenos en 1961 en una carta pastoral ofrecida a la Iglesia chilena su conciencia y el sentido con que se unian a este acontecimiento eclesial. Indicaban que, junto al Papa y los demas obispos del mundo, ellos "llevan la representacion de sus diocesis, es decir, de los cristianos que en ellas viven, cuyas necesidades y aspiraciones, los Prelados llevan en su corazon